"Cómo ser un buen peatón y no morir (asesinado) en el intento"

Hoy, en nuestra habitual entrega "Colabore, no sea pel... maso ", les presentamos:

"Cómo ser un buen peatón y no morir (asesinado) en el intento"

1- Al igual que en carreteras, procure mantener la derecha mientras camina (lento) y recurra preferentemente a la izquierda si desea incrementar su marcha. (La inversión de dicha regla es lo que habitualmente se ve en las veredas porteñas.)
2- ¡Así es damas! Ese par de zapatos está en liquidación ¡a un precio imperdible! Indiscutiblemente, está en todo su derecho de devorarlo con su mirada pero, por favor, tenga a bien girar sutilmente su cabeza hacia ambos lados, antes de lanzarse ferozmente hacia la vidriera.

3- Un frecuente entrenamiento en carrera con obstáculos le ayudará a llegar seco a destino, sorteando a los maniáticos encargados de la manguera y la escoba.

4- ¡LLUEVE! Aja- Esto es simple: si tiene paragüas, no utilice los techos y viceversa. Nota: el mirar hacia el costado es una extraña costumbre que se adapta a ambas circunstancias y el paragüas funciona como arma de defensa personal. Insisto: MIRE HACIA EL COSTADO!

5- Deambula a pie, en hora pico, y aún así pretente llegar rápido? Evite las avenidas: independientemente de SU estado físico, ciertas dificultades interrumpirán sus proyectos. EJ., las madres suicidas con cochecitos de bebes.
(Ver consejo expuesto en punto 3.)

6- Mire hacia ambos lados al salir de un negocio: siempre hay algun "desubicado" paseando tranquilamente por la vereda.

7- ¿Tiene luz verde para cruzar? No se fíe: las calles porteñas están repletas de daltónicos, generalmente choferes de taxi o bondi, que "confundirán" la tonalidad del semáforo.

8- No, usted no está confundido: esas líneas blancas dibujadas sobre el asfalto en ciertas esquinas representan la senda peatonal y los autos que ve por encima no son otra cosa que los renegados de siempre, generalmente porteños, apurados y poco considerados que estarán ahi, cada vez, para arruinarle el día.

¡SUERTE!

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